III Congreso de FRENADESO llamó a intensificar los esfuerzos en la inscripción del FAD.
En
la Clausura del III Congreso de FRENADESO, Federico Britton "In
Memoriam", el que participaron unos 300 delegados a nivel nacional y que
fue presidido por el profesor Raúl Vega de ASOPROF, se eligió por
unanimidad la nueva Dirección Nacional fruto del consenso de las
distintas organizaciones, capítulos y sectores sociales que conforman
FRENADESO.
Esta
es la nueva Dirección Nacional, que fue juramentada por el Dr. Fernando
Cebamanos, Presidente del FAD (en la foto faltan Héctor Hurtado y
Abdiel Behancourt):
Saúl Méndez
Héctor Hurtado
Andrés Rodríguez
Mario Almanza
Gabriel Castillo
Alba Pedrol
Jaime Caballero
Gloria Castillo
Ronaldo Ortiz
Teófila Zambrano
Abdiel Bethancourt
Celio Guerra
Saturnino Rodríguez
Eric Fernández
Ricardo Andrade
Yatenth Barrera
Antonio Menacho
Raúl Vega
Dalia Morales
Domingo Palacios
Teófilo González
Héctor Hurtado
Andrés Rodríguez
Mario Almanza
Gabriel Castillo
Alba Pedrol
Jaime Caballero
Gloria Castillo
Ronaldo Ortiz
Teófila Zambrano
Abdiel Bethancourt
Celio Guerra
Saturnino Rodríguez
Eric Fernández
Ricardo Andrade
Yatenth Barrera
Antonio Menacho
Raúl Vega
Dalia Morales
Domingo Palacios
Teófilo González
Hubo
participación de observadores nacionales entre ellos compañeros de
ANFACCS, COFADEAVI, presencia internacional con jóvenes del PSUV de
Venezuela y se recibieron mensajes de saludo de AECSS, y a nivel
internacional de Trabajadores
por Cuenta Propia de Nicaragua, el Frente Darío Santillán de Argentina y
desde la articulacion de movimientos sociales hacia el ALBA que dice:
29 de septiembre, San Pablo.
Estimados
compañeros y compañeras de FRENADESO, por la presente les queremos
hacer llegar un inmenso saludo al tercer congreso Ordinario de FRENADESO
desde la articulacion continental de movimientos sociales hacia el
ALBA. Los tiempos historicos que estamos atravesando en nuestraamerica
nos enfrentan al desafio de construir iniciativas de unidad y
confluencia de nuestros pueblos, tanto en el plano nacional como
continental, que enfrenten a la contraofensiva imperialista y que
permitan proyectar proyectos emancipatorios anclados en el protagonismo
popular y la soberania de nuestros territorios. Entendemos, entonces,
que esta iniciativa que, con tanto esfuerzo, han podido llevar adelante
en nuestro querido y hermano pais de Panama contribuye en este sentido y
mas aun en derrotar a los proyectos neoliberales que aun estan en curso
en nuestro continente. Les mandamos un fuerte abrazo revolucionario y
bolivariano y quedamos a disposicion para seguir fortaleciendo la
perspectiva de integracion de nuestros pueblos por abajo,
Un fraterno saludo
Secretaria operativa, movimientos sociales hacia el ALBA.
El
Congreso debatió los problemas más importantes del acontecer nacional,
trabajó en varias mesas de discusión, modificó su estatuto, actualizó su
plataforma de lucha, ratificó sus líneas estratégicas y aprobó su
documento político que en algunas de sus partes señala:
Tres años de Gobierno de Martinelli
Tres años de constantes sobresaltos, ebullición política y de una marcada crisis institucional. La campaña electoral que se desarrolló en el año 2009 parece no haberse detenido.
Tres
años signados por la corrupción, el autoritarismo, la represión, la
flagrante violación de los derechos humanos de la población, excesivo
endeudamiento, falta de transparencia en las licitaciones de los
llamados mega proyecto, encarecimiento de la canasta básica familiar,
atentados al ambiente, deterioro de los servicios públicos (agua,
energía eléctrica, encarecimiento del transporte público, crisis de la
basura, educación, salud, etc.)
A
ello el pueblo y sus organizaciones han respondido con la movilización y
la lucha logrando frenar a un alto costo algunas de las más perversas
medidas del Gobierno de turno: Ley Chorizo, proyecto de Cerro Colorado,
Sala V, entre otros.
En ese accionar del pueblo se han producido más de una decenas de muertos, miles de heridos y de arrestos. En
sólo 3 años de gestión la barbarie desatada por Martinelli supera a la
de sus antecesores, no sólo en número de víctimas sino también en
crueldad.
Emulando
con creces las prácticas gansteriles de sus antecesores, desde el
primer día Martinelli se propuso controlar todos los órganos e
instituciones del Estado. De
esta manera asaltó el Ministerio Público, compró diputados y partidos
políticos lo que le ha permitido hacerse de una amplia mayoría en la
Asamblea Nacional de Diputados, impuso a sus ungidos en la Corte Suprema
de Justicia y ahora busca apoderarse del Tribunal Electoral tal como lo
hizo con la Fiscalía Electoral.
Esto
fue posible, gracias a la complicidad del Partido Panameñista mientras
estuvo en el Gobierno y a la oposición cariñosa ejercida por el PRD en
la Asamblea de Diputados.
No sólo ha persistido el régimen de impunidad sino que se ha profundizado. La corrupción que prometieron combatir se ha agravado a niveles antes inimaginables.
En
lo económico se ha continuado con las mismas políticas de corte
neoliberal de los pasados gobiernos con la variante que en este caso ha
correspondido al Estado asumir directamente la ejecución y
financiamiento de un conjunto de obras de las cuales se benefician
directamente empresas y allegados al mandatario de turno.
En
tal sentido, se mantiene altos índices de crecimiento económico cuyos
beneficios se concentra en reducidas actividades económicas y pocas
manos marginando así a las amplias mayorías nacionales.
La
ejecución de estas políticas, el alto endeudamiento, el déficit fiscal
comienzan a tornarse peligrosos. De allí que el Gobierno busca hacerse
de nuevas fuentes de ingresos por la vía de las privatizaciones (agua,
salud, acciones del Estado en Cable and Wireless y empresas eléctricas,
la venta de los terrenos de Zona Libre de Colón, remate de costas,
playas y otros elementos del patrimonio nacional, ampliación en los
montos de emisión de bonos del Estado, etc.).
En
ese contexto y pese a las diferencias políticas que muestran, las
bancadas tanto de Gobierno como de oposición, han comenzado a aprobar
sin mediar ningún debate ni consulta con los sectores afectados, un
conjunto de proyectos de leyes como requisito para la implementación del
Tratado de Libre Comercio (TLC) o Tratado de Promoción Comercial (TPC)
con Estados Unidos.
Estas leyes buscan beneficiar los grandes consorcios norteamericanos en menoscabo de los intereses nacionales. Abren
las puertas de par en par sin mayores controles ni fiscalización a las
inversiones extranjeras y la entrada de productos y mercancías,
incluidos los transgénicos, mientras que los Estados Unidos exige
condicionantes adicionales y establece barreras técnicas y
administrativas para el ingreso de bienes y servicios panameños a su
mercado.
Buscan
amoldar nuestra legislación laboral a esos intereses, se constituyen en
un golpe severo a los productores nacionales, ponen nuevamente sobre el
tapete la posibilidad del desarrollo de proyectos mineros e
hidroeléctricos, constituyen una seria amenaza al ambiente, amenazan con
crear nuevos impuestos (renta sustitutiva), se condiciona el derecho de
propiedad intelectual a los intereses de las transnacionales
norteamericanas, limitan derechos ciudadanos y fomentan la
privatización, incluida la del agua y otros importantes recursos
naturales.
Paralelo
a ello, el Gobierno de Martinelli, fiel a los lineamientos
norteamericanos, ha impulsado la remilitarización del país, manteniendo
una política de seguridad más en función de las exigencias e intereses
de Estados Unidos que en brindar protección y seguridad a los
nacionales.
La
Policía Nacional ha logrado un presupuesto histórico, ampliado sus
equipos y armamentos, fortalecido sus unidades militares, mientras sigue
inaugurando bases aeronavales cuya justificación es la de combatir el
narcotráfico pero que en la práctica se insertan dentro de la estrategia
de guerra de Estados Unidos en la región.
Crecen
las denuncias de abusos y atropellos de la Policía Nacional contra la
población, en la misma medida que crecen la insatisfacción por el
creciente clima de inseguridad.
Ante
el descontento social por la falta de respuesta a los graves problemas
sociales y el alto costo de la vida, el Gobierno fomenta la ejecución de
programas asistencialistas o paternalistas para encubrir la pobreza y
en base a una costosa campaña publicitaria para mejorar su imagen. Entre estos programas están: 100 a los 70, Red de Oportunidades, Jumbo Ferias, Becas Universales, etc.
Ahora,
mediante ley, busca modificar los componentes de la canasta básica
familiar sustituyendo artículos y alimentos por otros de menor calidad,
para así reducir su costo. De esta manera la llamada canasta básica familiar quedará reducida apenas a un cartucho de productos.
Mientras
se habla de pleno empleo, se busca ocultar el alto número de panameños
(48%) que se desempeñan en el sector informal, sin seguridad social ni
otros beneficios laborales.
La Pugna Interburguesa
Grupos
tradicionales del sector político y económico dominante desplazados de
la mayor parte de los grandes dividendos que emanan de los negociados
que se promueven en las altas esferas del Estado, con conexiones
históricas en Washington y medios de comunicación social han venido
confrontando al Gobierno de Martinelli.
Representados
sus intereses en los partidos tradicionales han propiciado, con la
anuencia y la bendición de la Embajada norteamericana, una especie de
alianza política junto algunos grupos de la llamada sociedad civil
vinculados en algunos casos al financiamiento de instituciones
norteamericanas y hasta de ONG’s que son en la práctica una fachada de
la CIA.
Surge
así el denominado Frente por la Democracia, bautizado por FRENADESO
como el Frente Guacho para diferenciarlo claramente del Frente Amplio
por la Democracia (FAD), el instrumento político electoral del pueblo.
En
la reciente coyuntura donde Martinelli logra imponer a tambor batiente y
en otro madrugonazo las reformas electorales dirigidas particularmente a
beneficiar a los tránsfugas, fue evidente la poca capacidad de
convocatoria y la debilidad de estos partidos y sus aliados.
La
poca credibilidad del pueblo en estas organizaciones, pese al acelerado
desgaste del Gobierno de Martinelli, plantea una clara descomposición
del sistema controlado y manejado por los partidos tradicionales
(Partidocracia).
Ello
plantea una seria preocupación en la clase dominante y en la Embajada
norteamericana, acerca del futuro del mal llamado sistema democrático lo
cual puede significar en lo inmediato una grave crisis de
gobernabilidad ante el deterioro cada vez mayor de las instituciones del
Estado.
La
toma del Tribunal Electoral por parte de Martinelli pondrían en duda la
legitimidad y validez de los próximos comicios, con lo cual se abriría
una situación de inestabilidad política y un clima de zozobra de grandes
magnitudes.
Martinelli
y sus aliados, con todos sus recursos y prácticas mafiosas, han logrado
penetrar a los principales partidos políticos llamados de oposición,
como se demostró en las recientes elecciones del CEN del PRD donde Juan
Carlos Navarro logra la Secretaría General financiado por empresarios
como Gabriel Btesh, Pipo Virzi, Mello Alemán y David Ochy, todos
cercanos al actual mandatario.
Desde
los lados de la oposición burguesa no surge una alternativa clara en
estos momentos que permita canalizar a su favor el descontento popular. De
allí que se impulse la necesidad de consolidar una alianza política a
través del Frente Guacho, cada vez más difícil, o de barajar la
posibilidad de una especie de figura de salvación nacional vía una
candidatura por la libre postulación.
Cualquier cosa, menos permitir que una fuerza popular se erija como alternativa real en las próximas elecciones.
La campaña contra FRENADESO
Ello
explica los intentos de sectores políticos y de algunos medios de
comunicación por aislarnos y por desvirtuar las luchas que en base a
grandes sacrificios, enfrentando la persecución política, con más de 2
mil detenidos y cientos de heridos desarrollamos desde el primer día de
Gobierno contra las imposiciones de Martinelli que en algunos casos
contaron con el beneplácito de las mismas fracciones burguesas que
intentan empañar nuestro accionar combativo.
Esta
campaña emprendida contra FRENADESO para desacreditar el referente
social del pueblo panameño y anular la posibilidad de que su proyecto
político logre inscribirse, muestra el temor de los sectores dominantes
por la incursión electoral de una nueva propuesta que sea capaz de
desafiar el sistema de dominación en su propio terreno.
FRENADESO
ha logrado mostrarse como una fuerza realmente independiente de estos
sectores en pugna pese a los intentos de manipulación de la opinión
pública que pretende encasillar a la población en Gobierno u oposición,
tal como ha acontecido en otras épocas, particularmente en los años de
la dictadura militar. Tampoco estamos divididos entre políticos
partidistas e independientes.
Rechazamos
esa división, pues la sociedad panameña, como toda sociedad capitalista
esta dividida en clases sociales: ricos y pobres, opresores y
oprimidos, explotadores y explotados.
Por
primera vez en nuestra historia, una fuerza que representa los
intereses de los de abajo puede abrirse espacio para disputarle a los
partidos tradicionales de la burguesía los espacios del ejercicio del
poder político, teniendo claridad de las limitaciones que ello nos
traza, pero buscando sacarle provecho para la consecución de nuestros
objetivos estratégicos.
A intensificar los esfuerzos del FAD
Este
III Congreso Ordinario ratifica las líneas estratégicas aprobadas en
los anteriores Congresos y plantea que nuestra tarea central para el
período es la inscripción del Frente Amplio por la Democracia (FAD) para
dotar al pueblo de un instrumento político que coadyuve a la lucha por
una sociedad verdaderamente justa y humana.
No
se trata con ello de adherirnos a la institucionalidad podrida sino de
acercarnos a nuestros objetivos estratégicos, mediante este elemento
táctico, de construir poder popular, seguir acumulando fuerza social
organizada y crear las condiciones para la autoconvocatoria por parte de
pueblo de una Asamblea Constituyente Originaria que barra con la
podredumbre moral de las caducas instituciones y funde una nueva
República de bienestar y progreso para todos
Hoy,
más que nunca, debemos apelar a la trayectoria combativa que
caracteriza a esta organización que este mes arribó a su noveno
aniversario, a sus mejores experiencias y estilos de trabajo, a su forma
de dirección colectiva, a la calidad de sus dirigentes que siempre han
sabido poner los intereses del pueblo, de la colectividad, por encima de
los individualismo, ambiciones personales o ansias de figuración; a su
militancia fogueada en las principales gestas populares de los últimos
tiempos lo cual le ha ganado el reconocimiento de amplios sectores del
pueblo.
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