25/12/10

Panamá: Crisis del Ministerio Público es reflejo de la podredumbre moral del Estado oligárquico

La renuncia del Procurador Suplente, Giuseppe Bonissi, como resultado de los escándalos de corrupción y de penetración del narcotráfico en el Ministerio Público, es el desenlace de uno de los capítulos de la lucha por el control del poder entre dos de las facciones de la clase dominante, iniciado con la destitución de la Procuradora Ana Matilde Gómez.

El principal responsable de todo lo que los panameños hemos visto con estupor es el propio Presidente de la República, Ricado Martinelli, quien dentro del proyecto autoritario que lleva adelante, reflejado en el nombramiento de sus ungidos en la Corte Suprema de Justicia, en la Caja de Seguro Social y otras entidades; en la compra de Diputados, Alcaldes y Representantes de Corregimientos para hacerse del dominio total del país; en las presiones y chantajes a sus aliados político para que acepten ser devorados por Cambio Democrático; en los intentos de reelección presidencial; entregó el Ministerio Público a una partida de incapaces de dudosa reputación e incondicionales a él.

Es importante subrayar que todo lo acontecido en el Ministerio Público no es más que una muestra del grave deterioro y de la podredumbre moral que carcome las distintas instituciones del Estado como parte de un proceso que se ha venido agudizando durante los gobiernos del PRD y del Arnulfismo, pero que es un mal endémico de los sucesivos gobiernos oligárquicos y de los militares que han controlado al país y que lejos acabarse bajo el Gobierno de Martinelli, se ha venido profundizando.

Ello es lo que explica que el Ministerio Público se haya convertido bajo todos estos gobiernos en una institución guardiana del régimen de injusticia e impunidad que impera en el país, en la protectora de políticos corruptos, asesinos y ladrones de cuello blanco; en el ente que promueve el terrorismo judicial, que legítima los atropellos y abusos contra los pobres; que fomenta la persecución política contra dirigentes populares como lo demuestra el expediente amañado levantado por Martinelli contra 17 luchadores sociales, principalmente de FRENADESO, por oponerse a la perversa Ley 30 o Chorizo, y por medio del cual sólo ayer, miércoles 23 de diciembre, fue nuevamente detenido, por varias horas, el dirigente de FRENADESO y SUNTRACS en la provincia de Chiriquí, Jaime Caballero.

La crisis de la Justicia no se resolverá con un simple relevo de mando, como exige el gobierno norteamericano y repiten sus lacayos locales. Mientas los hilos del poder estén bajo el control de esta Mafiocracia y de la narcopolítica persistirá la corrupción, la impunidad y la falta de Justicia.

Desde FRENADESO insistimos que la única salida válida es una Asamblea Constituyente Originaria, autoconvocada por el pueblo, con plenos poderes, que funda una nueva República de bienestar y progreso para todos, barriendo de una vez por todas las caducas y corrompidas instituciones del Estado.

Aprovechamos estas últimas líneas, para enviar nuestro mensaje de unidad y solidaridad al pueblo panameño, nuestro llamado a construir poder popular y fortalecer las organizaciones del pueblo; a la vez que ratificamos nuestro compromiso de seguir luchando en el nuevo año por una sociedad de verdadera justicia y democracia.

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