Coincidiendo con la visita de Estado a España del Presidente de la República de Panamá, Martín Torrijos, y del Primer Vicepresidente y Ministro de Relaciones Exteriores, Samuel Lewis Navarro, queremos denunciar la grave situación existente en Panamá y las duras condiciones de vida por las que atraviesa la mayoría de sus ciudadanos.
Pertenecemos a l’Associació Catalana per la Pau i a la Fundació Pau i Solidaritat, con la que hemos participado en la Brigada de Solidaridat en Panamá desarrollando tareas de solidaridad y cooperación al desarrollo durante el mes de agosto de 2008.
Panamá es uno de los países latinoamericanos que está creciendo a mayor ritmo, con un PIB de crecimiento real superior al 8% y con previsiones de crecimiento superiores. Esta situación lleva a que los países industrializados consideren a Panamá como un país rico y con excelentes condiciones fiscales para poder invertir y más actualmente por la reciente aprobación de la ampliación del Canal de Panamá.
La realidad social y económica de los ciudadanos panameños dista muchísimo de estas cifras macroeconómicas. Así, de los aproximadamente 3 millones de habitantes que tiene Panamá, casi el 60% vive en condiciones de pobreza y aproximadamente el 40% en pobreza extrema, realidad que trata de ocultar el gobierno mediante la manipulación de cifras. Desde 1981 no se decreta un aumento general de salario en el país. El nivel de inflación es del 9.6%. La pérdida del poder adquisitivo de los salarios es del 37%. El 47% de los pensionados y/o jubilados es pobre.
En respuesta a esta dramática situación, en el año 2008 nace la Coordinadora de Lucha Por la Defensa de la Vida y la Dignidad del Pueblo, la cual aglutina diferentes sectores sociales, tales como sindicatos, asociaciones estudiantiles y de profesores, campesinos, obreros, médicos y asociaciones de pueblos indígenas, entre otros, y muy especialmente el Frente Nacional por la Defensa de los Derechos Económicos y Sociales (FRENADESO).
Con la intención de solucionar la grave problemática social y económica, la Coordinadora propone al Gobierno 15 puntos para paliar esta situación de crisis, entre los que destacan el aumento de salario de todos los trabajadores, la inmediata rebaja y congelamiento de los productos de primera necesidad, y otros puntos que hacen referencia a aspectos sociales y económicos.
Ante la negativa del Gobierno a tomar en cuenta las peticiones de la Coordinadora, se han ido realizando diferentes actos de protesta, que han llevado a la convocatoria de una huelga nacional de advertencia el día 4 de septiembre del presente año, que puede llevar al país a una huelga nacional indefinida.
El Gobierno de Martín Torrijos ha tratado de silenciar estas demandas mediante la represión policial, la contratación de sicarios y la aprobación del llamado plan de seguridad (Plan Mérida-Militarización del Darién-Norieguismo sin Noriega), con la intención de militarizar el país y de criminalizar la protesta social. Como consecuencia de estos actos represivos en el último año han sido asesinados por la Policía Nacional 3 obreros de la construcción (Osvaldo Lorenzo, Luiyi Argüelles e Iromi Smith) y otros han sido extorsionados por participar en la lucha social.
Por todo ello, queremos denunciar esta situación ante el Consulado de Panamá en Barcelona, para así poder mostrar cual es la situación real en la que vive la sociedad panameña, muy distante de la visión que de Panamá dan sus gobernantes.
Associació Catalana per la Pau i Fundació Pau i Solidaritat
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